• Un legislador japonés propone una reserva nacional de Bitcoin, destacando su naturaleza descentralizada como un activo estratégico para la economía de Japón.
  • Japón estudia una regulación más ligera de las criptomonedas para promover la innovación en la tecnología blockchain y garantizar la protección de los inversores.

Satoshi Hamada, un legislador japonés, ha hecho una sugerencia audaz, solicitando al gobierno que establezca una reserva nacional de Bitcoin. Citando su carácter descentralizado como principal ventaja, aconseja convertir parte de las reservas de divisas de Japón en Bitcoin.

Hamada afirma que esta cualidad convierte a Bitcoin en un activo estratégico perfecto en una época en la que las influencias externas están afectando progresivamente a las instituciones bancarias tradicionales.

También destacó proyectos similares en desarrollo en naciones como Brasil y Estados Unidos, indicando así un cambio mundial en las opiniones nacionales y el uso de la criptodivisa.

Japan is considering a strategic Bitcoin reserve.

A Japanese MP has proposed converting part of the country's foreign reserves into Bitcoin.

And the name of the MP – Satoshi Hamada. pic.twitter.com/JvNLrUubj5

— Lark Davis (@TheCryptoLark) December 13, 2024

Japón adopta el potencial estratégico de Bitcoin en medio de las tendencias mundiales

La idea de Hamada encaja con los acontecimientos mundiales actuales, destacando el Bitcoin como algo más que una mera herramienta especulativa. La senadora Cynthia Lummis ha abogado en Estados Unidos por el establecimiento de una reserva estratégica de Bitcoin , que en su opinión reforzará la durabilidad del dólar y apoyará el liderazgo nacional en el criptoespacio.

Brasil también se ha movido en esta dirección, ya que los legisladores abogan por políticas que incluyan Bitcoin en sus reservas nacionales. Estas ilustraciones muestran una tendencia creciente entre los países a diversificar sus planes financieros mediante la inclusión de activos digitales descentralizados.

La iniciativa de Hamada no podría ser más oportuna. La reputación de Bitcoin como contrapeso a la inestabilidad financiera y la inflación mantiene su tracción a medida que crece la incertidumbre económica en todas partes.

Hamada parece estar presentando a Japón como una nación criptográfica con visión de futuro al sugerir este cambio, por lo que tal vez proporcione un modelo a seguir para otras naciones asiáticas. Sin embargo, la viabilidad de esta estrategia dependería principalmente de la claridad jurídica y de una mayor adopción de Bitcoin en el sistema bancario de Japón.

Aparte de sus posibles beneficios financieros, la adopción nacional de Bitcoin podría inspirar la creatividad en las tecnologías blockchain dentro de Japón. Este énfasis en fomentar el desarrollo técnico encaja con la política más general de Japón hacia las criptodivisas.

Para fomentar la innovación, CNF informó anteriormente de que Japón tiene la intención de tener menos reglas para los intermediarios de criptomonedas sin intercambio, incluidas las aplicaciones de juegos y las billeteras autoalojadas.